Según los expertos médicos, el cáncer es un conjunto complejo de enfermedades, que pueden ser el resultado de varios factores, como: genética, infecciones específicas, malos hábitos de estilo de vida, como mala alimentación, inactividad física, consumo de tabaco y alcohol y exposición ambiental a Diversos tipos de químicos y radiaciones.

Se ha comprobado científicamente que estos factores aumentan el riesgo de cáncer.

El Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer estimó que aproximadamente el 20% del total de pacientes de cáncer estadounidenses están relacionados con el aumento de peso, la mala alimentación, la inactividad física y el consumo excesivo de alcohol.

Afortunadamente, el cáncer se puede prevenir y el riesgo de esta enfermedad se reduce al:

Ejercicio regular
Mantener un peso corporal saludable.
Evitar fumar
Una dieta rica en verduras y frutas orgánicas.
Los siguientes 8 alimentos son extremadamente dañinos y pueden aumentar el riesgo de cáncer:

Alimentos azucarados refinados y artificiales

El consumo excesivo de alimentos ricos en azúcar refinada y edulcorantes de fructosa artificial, como el jarabe de maíz con alto contenido de fructosa, causa el desarrollo de numerosos problemas de salud.

Estos alimentos aumentan los niveles de insulina y estimulan el crecimiento de las células cancerosas. La revista American Society for Clinical Nutrition publicó un estudio en 2006 que mostró que los participantes que consumían cantidades más altas de alimentos endulzados con azúcar tenían un mayor riesgo de cáncer de páncreas.

Por lo tanto, asegúrese de reemplazar estos alimentos con alternativas saludables y naturales como la stevia, la miel cruda, el jarabe de arce, la melaza negra o el jaggery.

Harina blanca

Numerosos alimentos procesados ​​en estos días son altos en harina blanca refinada, que es rica en carbohidratos, que afectan negativamente a la salud, elevan los niveles de azúcar en la sangre y aumentan el riesgo de cáncer.

Los estudios han demostrado que las mujeres que consumían cantidades excesivas de carbohidratos tenían un mayor riesgo de cáncer de mama. Por lo tanto, sustituya la harina blanca refinada con alternativas más saludables como harina de trigo integral, almendra, quinua o cebada.

Alimentos ahumados y en escabeche

El consumo regular de alimentos encurtidos y ahumados pone en peligro la salud, ya que el proceso de ahumado de las carnes ahumadas deja numerosos ingredientes tóxicos en la carne, mientras que los alimentos encurtidos tienen un alto contenido de nitratos que se transforman en N-nitroso, un ingrediente que aumenta el riesgo de cáncer.

Además, estos alimentos son abundantes en conservantes que aseguran una vida útil más larga y conducen al daño celular y al desarrollo del cáncer. Por lo tanto, recomendamos evitarlos por completo.

Carne roja y procesada.

Las carnes procesadas, como el jamón, las salchichas y el tocino, son ricas en conservantes nocivos y sal. Los investigadores han encontrado que el exceso de ingesta de carne procesada podría conducir al cáncer colorrectal.

La ingesta excesiva de carne roja aumenta las posibilidades de desarrollar cáncer de próstata y colorrectal también. Por lo tanto, asegúrate de consumir solo carne alimentada con pasto.

Salmón de granja

El salmón cultivado y el salmón silvestre son dos tipos con enormes diferencias, ya que este último ofrece numerosos beneficios para la salud, mientras que el primero plantea graves riesgos para la salud.

El consumo de salmón de piscifactoría podría, de hecho, causar cáncer.

Los investigadores han encontrado que el salmón de piscifactoría contiene niveles significativamente más altos de químicos dañinos e ingredientes que promueven el cáncer, como mercurio, dioxinas, toxafeno, retardantes de llama y bifenilos policlorados.

Aceites hidrogenados

Los aceites hidrogenados se convierten en venenos cuando se procesan y fabrican. Estos aceites en realidad se extraen químicamente de los vegetales para preservar y prolongar la vida útil de los alimentos procesados.

Sin embargo, son altos en grasas trans y ácidos grasos omega-6.

La pequeña cantidad de estos ácidos podría ser beneficiosa para la salud, pero las cantidades más altas afectan negativamente la estructura de la membrana y la flexibilidad de las células, lo que aumenta el riesgo de numerosos tipos de cáncer, incluido el cáncer de piel.

Las grasas trans, por otro lado, aumentan el riesgo de cáncer de mama, próstata y colorrectal. Por lo tanto, debes usar coco virgen extra o aceite de oliva en su lugar.

Patatas fritas

Las papas fritas se producen a temperaturas extremadamente altas, lo que provoca la creación de acrilamida, un carcinógeno popular.

Según un estudio publicado por el Instituto Nacional del Cáncer, este ingrediente aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de ovario, mama, próstata y tracto digestivo.

Las papas fritas también son ricas en calorías y grasas que aumentan la presión arterial y los niveles de colesterol y conducen a la obesidad.

Las papas fritas también son ricas en sabores y conservantes artificiales, así que asegúrate de evitarlas y reemplázalas con las hechas en casa preparadas con aceite de oliva.

Además, definitivamente deberías probar los chips de plátano o manzana al horno también.

Palomitas de microondas

Las bolsas de palomitas de microondas contienen un químico extremadamente tóxico conocido como ácido perfluorooctanoico, que se ha encontrado que aumenta el riesgo de cáncer de riñón y vejiga y causa un deterioro de la fertilidad en las mujeres.

Estos productos también son ricos en numerosos productos de OGM y conservantes, como el galato de propilo.