Las personas han reconocido y valorado las sorprendentes propiedades curativas de la cúrcuma durante siglos, y esta poderosa hierba antiinflamatoria puede mejorar la salud de muchas maneras.

Tiene un impresionante perfil nutricional, y según Dr.Axe:

“Una cucharada (siete gramos) de cúrcuma molida contiene aproximadamente:

23.9 calorías

4,4 gramos de carbohidratos

Proteína de 0.5 gramos

0.7 gramos de grasa

1.4 gramos de fibra

0.5 miligramos de manganeso (26 por ciento DV)

2.8 miligramos de hierro (16 por ciento DV)

0,1 miligramo de vitamina B6 (6 por ciento DV)

170 miligramos de potasio (5 por ciento DV)

1.7 miligramos de vitamina C (3 por ciento DV)

13 miligramos de magnesio (3 por ciento DV)

Los beneficios de la cúrcuma provienen de estos nutrientes, junto con su menor cantidad de vitamina E, vitamina K, niacina, ácido fólico, calcio, fósforo, zinc y cobre “.

El agua de cúrcuma es una de las mejores maneras de obtener los beneficios de esta especia, y todo lo que tienes que hacer es agregar un poco de cúrcuma a un vaso de agua tibia. Revuelva y beba mientras está caliente.

Aquí están los efectos del consumo regular de esta bebida cada mañana:

Previene el daño hepático.

La cúrcuma previene el daño al hígado e incluso regenera las células hepáticas dañadas. Estimula la producción natural de bilis y mejora la función de la vesícula biliar.

Apoya la salud del cerebro

La cúrcuma es una rica fuente de antioxidantes como el curcuminoide que previene el daño a las células del cerebro y neutraliza los radicales libres.

Alivia el dolor y combate la inflamación.

La inflamación crónica es la causa principal de varias dolencias y enfermedades, y esta especia combate eficazmente la inflamación y alivia el dolor en el cuerpo.

Mejora la función de la tiroides.

La cúrcuma es de gran ayuda en el tratamiento de afecciones tiroideas autoinmunes como la enfermedad de Graves y la tiroiditis de Hashimoto, reduce el colesterol alto y reduce la atrofia de la glándula tiroides.